En el post de hoy les voy a dar algunos consejos de moda que reflexione en un avión mientras leía a Osho devolviéndome de Milano hace unas semanas. En la moda hay que ser creadores de individualidad y destructores de personalidad. La personalidad es la parte de ti que se amolda a las situaciones y te impide ser realmente tu. Es la que te ayuda a esconderte cuando no quieres mostrarte como eres, incluso muchas veces no te deja ni siquiera saber como eres en realidad. Descubrir tu propio estilo no significa encajar dentro de una personalidad preestablecida (hippie, rockera o cualquier otro calificativo). Encontrar tu estilo es saber qué te gusta a ti. Con qué te sientes cómoda. Muchas veces no nos sentimos cómodos con algo porque tenemos una idea preconcebida sobre como deben verse las cosas. Nos creamos ciertas expectativas y si no son iguales sentimos que no nos identificamos. Nosotros mismos somos los culpables de esto. Buscar el propio estilo es como dejar salir el artista que hay dentro. Uno nunca verá a un artista queriendo hacer la misma obra de arte que alguien más ya hizo. Tampoco se trata de ser rebuscados o excéntricos. Probablemente tengan algunos puntos en común, pero seguramente se habrán abordado desde puntos de vista únicos de cada artista. Así pasa con la moda. Cuando alcanzas ese punto en el que puedes tomar decisiones desde tu interior, puedes dejar de ser un clon. Puedes dejar de copiar looks y comenzar a tomar inspiración, simplemente eso, inspiración o información, que tu misma decides si quieres adoptar o no. Es crear valor sin destruir tu individualidad.
Cuando la moda genera valor en tu individualidad podrás decir que has creado tu propio estilo. Antes sólo serás un clon más. O un collage de clones, como quieras llamarlo. El propósito de engrandecer tu individualidad a través de la moda es que encuentres diversión y no esclavitud.
